martes, 8 de septiembre de 2009

El ruido de actividades domésticas

Escrito por Juan Francisco Vega Romero

martes, 08 de septiembre de 2009

Son muchos los casos, en que los ciudadanos de nuestra querida ciudad, se quejan de las actividades domésticas o comportamientos de vecinos. Obras menores los fines de semana, electrodomésticos ruidosos, música alta, fiestas en domicilios o lugares privados hasta altas horas de la noche, grupos de personas reunidas junto a ventanas de dormitorios, ladridos de perros, botellones, coches discotecas, etc.…

En España disponemos actualmente de legislación específica en materia de contaminación acústica, como es la Ley 37/03, así como dos Reales Decretos que la desarrollan, además de las propias leyes creadas por las comunidades autónomas y como es nuestro caso, también los ayuntamientos pueden regular este problema ambiental a través de ordenanzas municipales al carecer de competencia legislativa.
Dependiendo del tipo o circunstancia de contaminación acústica, tenemos derechos u obligaciones a acogernos a una u otra legislación o normativa, así como a unos límites de valoración que no se deben superar en decibelios. Ni que decir queda aclarar, que no era como antiguamente, que actualmente existen vecinos que se creen que hasta las doce de la madrugada se podía molestar, ya que va en función de los decibelios que no se pueden superar, dependiendo de hora y lugar.
El problema del ruido de las actividades domésticas o comportamientos ciudadanos es que no existe una unidad de criterio nacional, es decir, que la Ley del Ruido 37/03, excluye de su ámbito de aplicación este tipo de contaminación acústica, remitiéndose a lo regulado en las ordenanzas municipales. En mi opinión es algo lógico, porque seguro que los legisladores pensaron que en Murcia, sus vecinos no tienen los mismos problemas domésticos que los que tenemos en Ceuta. Está claro, que este tipo de molestias y sufrimientos es competencia de nuestro Ayuntamiento de Ceuta y que está regulado por la normativa local, la Ordenanza de Ruidos, Vibraciones y Otras formas de Energía, aprobada en el año 1.993.
Lo primero que me llama la atención es el año y siglo de la ordenanza, siglo XX, año 93 y actualmente estamos en el siglo XXI, año 09, ¿es que nuestra sociedad caballa no ha evolucionado con el tiempo?, ¿existen los mismos problemas de contaminación acústica en nuestra ciudad, que cuando se creó nuestra ordenanza? Evidentemente hemos evolucionado como sociedad y rotundamente, los problemas ambientales de ruidos actuales, han crecido, ya que es algo que camina junto con la evolución social.
Si leemos, aunque sea, por encima nuestra actual normativa local, podemos llegar a la conclusión, de que es una normativa muy light en molestias por actividades domésticas o comportamientos vecinales comparadas con otras, como modelo, la normativa de ruidos del Ayuntamiento de Valencia sanciona que durante el fin de semana se realice cualquier tipo de obra, así como por ejemplo perforaciones en la pared con un taladro, no estamos hablando que por hacer un boquete en la pared se avise a la policía local y denuncien, pero si te pegas tres horas un sábado o domingo haciendo perforaciones desde buena mañana, ¿a quién no le molesta?
En cuanto a los ruidos producidos por equipos reproductores de sonido y audiovisuales, coches discoteca, etc., si observamos nuestra normativa, hay que realizar una medición acústica, cuando en otros lugares, cuando un vecino emite con el televisor, la  música a un volumen excesivo, generando molestias que, a juicio de los agentes de la policía local actuantes, resulten inadmisibles, denuncian directamente sin realizar la medición. Referente al tema de grupitos bajo las ventanas de dormitorios o botellón, pues ahí no se puede hacer nada con la normativa en la mano, ya que no está regulada ninguna medida.
Lo difícil en mi opinión, no es crear una nueva normativa, con los procedimientos,  métodos y sanciones actualizados con la Ley, lo realmente difícil, es encontrar a algún político que una vez realizada, de el paso valiente hacia adelante para que se apruebe, entonces todos los vecinos ganaríamos en salud, bienestar y calidad de vida.

http://www.elfaroceutamelilla.es/content/view/38947/143/