domingo, 8 de marzo de 2009

El Seprona es competente para realizar mediciones acústicas

Escrito por Carmen Echarri

domingo, 08 de marzo de 2009

Medio Ambiente señala que la unidad de la Guardia Civil puede realizar mediciones para atender las quejas de los particulares por el ruido.

Medio Ambiente señala que la unidad de la Guardia Civil puede realizar mediciones para atender las quejas de los particulares por el ruido.

El Seprona tiene competencia para actuar en caso de denuncia por exceso de ruido y realizar las mediciones acústicas necesarias  que tienen carácter oficial a efectos legales. Así lo ha señalado el Ministerio de Medio Ambiente en respuesta a la petición cursada por la Asociación contra el Ruido, ASCORCE, que ve cómo las quejas presentadas por contaminación acústica no se materializan en sanciones concretas.

De hecho, la propia Consejería de Gobernación ha reconocido carecer de aparato para poder realizar estas mediciones, habiéndose creado un vacío que, según el Ministerio, no debe existir ya que debe ser cubierto por la unidad de la Guardia Civil que, en Ceuta, tiene tan sólo tres efectivos operativos.
La respuesta del Ministerio es importante. Ceuta aparece en la Encuesta de Calidad de Vida del Instituto Nacional de Estadística sobre hogares que sufren los ruidos exteriores en primer lugar, un 10% por encima de quien es segunda en el ránking (Valencia) un un 25% por encima de la media nacional.
Esta situación choca con un claro vacío legislativo, ya que la Ciudad todavía no ha desarrollado reglamento alguno ni ordenanzas en esta materia. La única ordenanza sobre ruido que existe en la ciudad data de 1993, y según reconoce Ascorce, “está obsoleta”. “No se respeta el Reglamento de Actividades Molestas, todavía en vigor, por no haber desarrollado una normativa propia”, añade,” y no se expone al periodo de alegaciones de los vecinos afectados, como es el caso de la actividad de Terrazas y Veladores que se concede a locales con licencia de música que se encuentran en zona residencial, actividad incompatible con este uso y prohibida ya en casi toda España”, indica. “Se ha cambiado un reglamento de Establecimientos de Ocio por la vía de urgencia, basándose en una Ordenanza y Reglamento, obsoletos y dudosa legalidad, ya que van contra la legislación estatal y las directivas comunitarias. Esto nos conduce a tener que recurrir a la Jurisdicción correspondiente, con lo que la carga de la prueba la soportamos lo mas débiles, económicamente, y los que sufrimos el ruido”, indica.
A esa vía judicial han acudido varias persona que se confiesan víctimas del ruido, poniendo dinero de su propio bolsillo para conseguir que los trámites judiciales emprendidas sigan adelante.  “En marzo de 2007 en un pleno de la Asamblea  el equipo de Gobierno reconoció que Ceuta tiene un problema grave medio ambiental con el ruido y se aprobó hacer el Mapa de Ruidos, en veinte meses no se ha dotado por lo que no se ha cumplido un Acuerdo de la Asamblea”, añade la asociación.
Fue en el pasado pleno de febrero cuando se acordó la creación de un mapa del ruido, trámite que sigue a la encuesta encargada por el Ayuntamiento para conocer las zonas más afectadas por este tipo de contaminación que, entre otros efectos, genera problemas de estrés, pérdida de peso y desequilibrios psicológicos a quienes lo sufren.
La vía de la denuncia se encuentra, en estos momentos, bloqueada. No hay sonómetros. El único calibrador existente está averiado desde el año pasado, “con lo que no se pueden hacer mediciones con garantías jurídicas para afectados e infractores”, apunta Ascorce. “A primeros de enero de 2009, cumplen el periodo de garantía de los aparatos de medición de la Ciudad Autónoma con lo que hay que remitirlos de nuevo al Centro de Metrología para su revisión y estaremos otra vez tres o cuatro meses sin mediciones”, lamenta. Tampoco existen sonómetros de tonales, para comprobar los ruidos de los locales, de ahí que las licencias otorgadas se dispensan sin comprobar el efecto del ruido en la población más cercana. Ante este panorama, la respuesta dada por el Ministerio se erige  en el salvavidas al que ahora se aferran los afectados por esta contaminación a la hora de hacer valer ante los tribunales sus derechos. Hasta la fecha no se habían solicitado mediciones a esta unidad de la Guardia Civil por parte de particulares.

Seis millones de vehículos en dos ejes

La creación de un mapa del ruido resulta vital para conocer la auténtica realidad de una ciudad en la que no existe ninguna zona libre de ruido. En septiembre de 2007 se apagaron los dos únicos paneles informativos que daban los decibelios las 24 horas del día, siendo imposible, en la actualidad, determinar el nivel de ruido alcanzado. Pero hay más. Dos ejes viarios de la ciudad soportan el tránsito de seis millones de vehículos al año, sin que por ello se haya adoptado medida alguna para paliar el efecto en las zonas habitadas más cercanas.

http://www.elfaroceutamelilla.es/content/view/28738/52/